Los concejales Victoria Castro y Germán Casagua entregaron sus propios balances del Concejo y de la Administración Municipal, cada uno con distintas ópticas. El resultado es agridulce.
Neiva
En medio de desencuentros, y una de las peores crisis en la que han abundado los señalamientos entre algunos de los cabildantes terminaron las últimas sesiones del año, del Concejo de Neiva.
Si el año anterior no faltaron los malos momentos, pues en esta oportunidad sobraron por cuenta del novelón derivado del proceso de elección del próximo Contralor Municipal que terminó con la derogatoria de lo poco que se había logrado adelantar, inicialmente.
Los concejales Germán Casagua, líder de la oposición y Victoria Castro, perteneciente a la corriente del alcalde Gorky Muñoz entregaron cada uno su propio balance de lo que fue este año para el Concejo de la ciudad.
Por supuesto, se trata de dos ópticas diferentes que expresaron cada quien su sentir sobre lo que ocurrió en la corporación edilicia así como en la ciudad, a partir de las acciones adelantadas por el gobierno local.
Mientras Casagua insistió con las graves denuncias sobre lo que está ocurriendo con el contrato de alumbrado público, y la situación financiera de las Empresas Públicas de Neiva, entre otras, Castro aseguró que Neiva dio grandes pasos hacia una internacionalización gracias a la gestión del alcalde Muñoz y advirtió que el tiempo le dará la razón a sus actuaciones.
Sin embargo, ambos coincidieron en algunas cosas, las cuales tienen que ver, primero, con la desafortunada renuncia de su dignidad como presidente de la mesa directiva, de Deiby Martínez, alegando motivos personales, así como la salida de la profesora Leyla Rincón, también presidenta encargada, por una supuesta candidatura a la Cámara de Representantes.
A Rincón, la señalan de haber dejado abandonados sus compromisos, precisamente cuando se adelantaba un proceso para escoger a la universidad que seleccionará a los candidatos al cargo de Contralor.
Mientras tanto, a Martínez no le fue mejor, pues su renuncia inesperada no gustó para nada y hubo hasta golpes de pecho por el voto que le dieron el año anterior para que fuera el presidente de la mesa directiva, en 2021.
‘A Neiva le fue muy mal’
Para Germán Casagua, este tampoco fue un buen año para Neiva. Insiste en que el alcalde Gorky Muñoz le entregó un negocio multimillonario a una empresa privada en la que la Administración Municipal no tiene arte ni parte.
Hizo hincapié en que se trató de la peor decisión, pues a su juicio, entregó un negocio para que se enriquezcan unos pocos, al tiempo que desvirtuó la afirmación según la cual, si al alcalde le va bien, a Neiva le va bien. “Aquí, al alcalde y a algunos amigos del alcalde así como a las personas que permitieron que entregara el negocio, les fue muy bien pero al municipio le fue muy mal”, dijo.
Casagua advirtió que los estados financieros de las Empresas Públicas de Neiva, que a la fecha registran un déficit de $40.000 millones así como deudas con entidades bancarias por aproximadamente $21.000 millones, deben preocupar.
“Le solicitamos a la gerencia, que se maneje esta empresa con responsabilidad y de igual manera advertimos que no vaya a ser que estos catastróficos resultados financieros que nos están arrojando, sean calculados para que de aquí a mañana el alcalde Gorky Muñoz les diga a los neivanos que esa es una empresa inviable financieramente y que hay necesidad de venderla a un privado”, indicó Casagua.
Pero el jefe de la oposición no se guardó nada en su balance del año. Insistió en que el estado de la malla vial de la ciudad está en un estado lamentable, al tiempo que alertó sobre el endeudamiento que por $60.000 millones le aprobó el Concejo de la ciudad al alcalde Muñoz y del que hasta ahora, se sabe que se ha utilizado muy poco.
En el balance, Casagua también le dio palo a lo ocurrido con el proceso de elección del Contralor Municipal. Dijo que hubo muchos desaciertos, comenzando con la renuncia del presidente Deiby Martínez y luego la de la profesora Leyla Rincón. “Dejó tirado el proceso y eso ha generado una demora enorme en este caso”, sentenció.
En conclusión, indicó Casagua que con excepción del tema del Contralor, el Concejo siempre fue de puertas abiertas, es decir que el año fue bueno para la corporación, pero nefasto para la ciudad.
El otro balance
La concejala Victoria Castro tiene otro balance. Sostuvo que este año al igual que el anterior, en general el Concejo fue propositivo lo mismo que la Administración Municipal a quien, agregó, se le ha entregado las herramientas para que el programa de gobierno siga avanzando.
Destacó que durante este año hubo un enfoque hacia la organización dentro de lo que resaltó una política pública de internacionalización, con todo y las críticas.
“Esos cambios van a dar resultados positivos en temas importantes para Neiva como inversión, y también conocer lugares mágicos de nuestra ciudad. Creo que eso de la internacionalización le va a dar un punto de partida muy importante”, precisó Castro.
Aunque reconoce que la malla vial del municipio no está bien, a renglón seguido afirma que desde la Administración se le está apostando a una modernización que para muchos, todavía no se ve. Por eso, no tiene problema alguno en expresar que el alcalde Muñoz ha demostrado que no le quedó grande la ciudad.
“Esta alcaldía no se ha dedicado a hacer cosas pequeñas ni a organizar ornamentación, que por supuesto que es importante, pero se ha dedicado a hacer temas de infraestructura grande que le van a dejar un muy buen resultado a la ciudad”, explicó Castro.
Dijo que igualmente, la Administración le ha dado importancia a recuperar los llamados ‘elefantes blancos’, y obras que quedaron pendientes de terminar como las del Malecón y el CAIMI. “Creo que el alcalde está asumiendo un desgaste natural pero creo que en algunos años el tiempo le va a dar la razón, va a demostrar que en efecto hizo las cosas bien y que es uno de los mejores alcaldes que ha tenido la ciudad”.
Al igual que Casagua, Victoria Castro también descalificó con todo, el proceso de elección del Contralor Municipal que comenzó a salir mal desde el retraso en la convocatoria y luego con la que llamó renuncia irresponsable del entonces presidente de la corporación, Deiby Martínez. Por eso, dijo que se arrepiente de haber ayudado a elegirlo.
“Yo me siento culpable y le pido disculpas a Neiva porque los que votamos por él, también somos responsables de eso. De lo único que me he arrepentido hasta el momento en la Concejo es de haber permitido que Deiby Martínez llevara las riendas de la Corporación, creo que fue la peor decisión”.
Concluye diciendo en un tono desesperanzador, que seguramente lo sucedido este año en el Concejo de Neiva, es una de las peores vergüenzas que ha vivido la Corporación.
Así están las cosas para la ciudad y para el Concejo que ahora con Jaime Unda como nuevo presidente ha arrancado otro proceso para seleccionar la universidad que tendrá a su cargo escoger la terna de donde saldrá el nombre del próximo Contralor y el Secretario General de la Corporación.
Pero Castro no cree que los tiempos den para alcanzar hacer todo lo que aún hace falta, en lo que resta de este año, puesto que tampoco está segura de que el alcalde Muñoz llame a extras.