El partido en el Huila se prepara de cara a las próximas elecciones al Congreso de la República pero en equipo con movimientos alternativos para asegurar la victoria. El presidente de los verdes, diputado Armando Acuña, explicó cómo piensan jugar.
Neiva. Los verdes ene l Huila la tienen clara. Ya saben cómo jugarán en las próximas elecciones al Congreso de la República. Saben que no será fácil si se tiene en cuenta que en el pasado algunos de ellos no hicieron quedar muy bien a su partido, ese que hace algunos años se presentó como una alternativa de cambio y transparencia porque estaba integrada sobre todo por jóvenes, educados en universidades públicas y con propuestas nuevas.
Pero qué va, a muchos de ellos les ganó la ambición e incluso, para el gusto de analistas, llegaron con más mañas y marrullas que los políticos de la vieja guardia.
En la tarea de diseñar la estrategia está el que desde hace dos años encabeza la presidencia de la Alianza Verde en el Huila, el diputado Armando Acuña, quien sostiene que se lanzan con una lista que tiene todos los matices políticos, la cual encabezará él mismo, como candidato a la Cámara de Representantes.
“Hemos querido conformar una lista de unidad de todas las fuerzas alternativas, incluyendo aquí el pacto histórico de Gustavo Petro, sus aliados y la Coalición de la Esperanza. Se ha venido trabajando en torno a ellos para lograr unificar, respetando las candidaturas a las presidencias, con el objetivo de presentarles a los huilenses una lista única a la Cámara de Representantes”, precisó Acuña.
No ha sido una tarea fácil, según reconoce el propio Acuña. Es que el panorama quedó enrarecido en la Alianza Verde con lo ocurrido en julio pasado en la instalación del Congreso, cuando el partido fue señalado de repetir viejas prácticas para volver a hacer parte de la mesa directiva, cuando ya no podían porque el turno era para la Colombia Humana.
A pesar de semejante lío, Acuña dice que la Alianza Verde está en la disposición de armar lista con los aliados de la Coalición de la Esperanza. Pero igual, dentro de la colectividad hay unas precandidaturas a la Cámara de Representantes.
Entre ellas está la de Camilo Durán, del sector del diputado Virgilio Huergos, y por supuesto Armando Acuña, mientras que por el sur, proveniente de las toldas conservadoras se perfila Sergio Zúñiga. Ahora bien, dentro del partido, sus miembros no descartan la posibilidad de que en el caso del Huila juegue una sola persona por los Verdes.
Por su lado el Nuevo Liberalismo y los liberales independientes que hacen parte de la Coalición de la Esperanza postularán un aspirante por cada movimiento, no sin antes escoger entre varios precandidatos. Hasta ahí irían ya tres integrantes en la lista y faltaría una persona que será una mujer que iría por el Pacto Histórico pero que tenga votos.
Ya se sabe que en la lista de Senado, estará Nica Cuéllar, hija del empresario del transporte, Armando Cuéllar, mientras que en la de Cámara aún se barajan algunos nombres, entre ellos el de la concejal Leyla Rincón. En su caso ella está representando al Polo Democrático pero también quieren jugar en esa selección de la cuota femenina, la Unión Patriótica y otros sectores, obviamente de izquierda. Sin embargo, la semana anterior, fuentes cercanas le aseguraron a este medio que la cabildante estaría casi que decidida a decir que no, aunque aún está haciendo consultas.
Los verdes en el Huila
Para nadie es un secreto que entre los verdes hay una tensa calma que aparentemente los tiene divididos. En el Huila, hay dos tendencias representadas en la Asamblea Departamental. Una, que inicialmente era del diputado Oscar Urueña y ahora que él no está, pues tiene como guía a Huergos. Ellos están con la precandidatura presidencial de Carlos Amaya.
Y la segunda que orienta el diputado Armando Acuña, y ahí el apoyo es para el ex gobernador de Nariño, Camilo Romero. El sector de la antigua Alianza Verde está con Fajardo. Sin embargo, Acuña insiste en que realmente no existe una división como tal porque hay entendimiento.
“En el Huila esa disidencia de Angélica Lozano no nos afectaría, pese a que hay tres precandidaturas presidenciales porque estamos en la mejor disposición de unidad y es posible que el Partido Alianza Verde esté representado en una sola persona, pero depende de lo que pueda suceder en el Pacto Histórico en la escogencia de la mujer”.
Las viejas manchas
Mientras tanto, para nadie es un secreto que en el pasado cercano la Alianza Verde decepcionó a muchos gracias a las actuaciones de algunos de sus miembros, en especial los jóvenes que terminaron investigados por las autoridades.
Lo ocurrido, sin duda pesará en las próxima elecciones, Acuña como presidente de la colectividad en el departamento es consciente de ello. Sigue creyendo que por ser un partido en formación la Alianza Verde sigue siendo una alternativa de poder aunque no desconoce que en efecto se han cometido muchos errores y también ha tenido aciertos.
Hace hincapié en que en las pasadas elecciones regionales el partido le negó el aval a más de 10 personas investigadas en el Huila lo que según él, les permitió obtener dos puestos en la Asamblea. Pero igualmente, Acuña reconoce que algunos concejales y alcaldes verdes a quienes el partido avaló de buena fe no han asumido una responsabilidad con el partido que les dio su bendición.
“De ello somos conscientes y ahí vamos a tomar decisiones a futuro. A esas personas que solo están llegando por un aval y siguen comprometidos con los dirigentes de los partidos tradicionales, no las vamos a seguir avalando”, sostiene Acuña.
Insiste en que sobre los hechos ocurridos en el pasado con algunos verdes indisciplinados, ya fueron superados por el partido pero las responsabilidades siguen siendo individuales pues de hecho algunos de ellos siguen vinculados a investigaciones.
Y es que no es secreto que hace algunos años muchos de los aspirantes a corporaciones en el Huila, avalados por la naciente Alianza Verde eran muchachos, salidos de las aulas de la universidad pública, lo que parecía ser garantía de transparencia y cambio.
Sin embargo, resultó no ser así y solo algunos hicieron la tarea. Es decir, pronto se comprobó que ser joven no es sinónimo de renovación. Una afirmación muy cierta pues una vez elegidos demuestran que han aprendido muy rápido tienen más resabios que los antiguos políticos.
“Incluso estamos viendo a algunos aspirantes que dicen ser renovación con ínfulas casi que de traquetos, ofreciendo plata. Dice uno, si esto es la renovación de la política, entonces para dónde vamos”, se preguntó Acuña.
Pero ese gol es el que los verdes no quieren dejar que les hagan de nuevo, de ahí que según el presidente del partido, están tratando con la coalición levantar una especie de cerco en la conformación de una buena lista, aunque no es fácil, reconoce.
Mientras tanto, para nadie es un secreto que en el pasado cercano la Alianza Verde decepcionó a muchos gracias a las actuaciones de algunos de sus miembros, en especial los jóvenes que terminaron investigados por las autoridades.
No le falta razón, pues si no se logra la unidad en esta oportunidad, el desastre sería mayúsculo dado que lo que el país requiere es de cambios sustanciales en todos los sectores como la dirigencia política.
En resumen, Acuña afirma que lo que la propuesta verde junto con los movimientos políticos alternativos con los que está trabajando gira en torno a varios puntos. Primero, lograr la unidad para derrotar a la vieja clase política, luego lograr algunos acuerdos internos entre quienes conformen la lista a la Cámara. Una vez concretado, la idea es aterrizar en el Huila las propuestas acordadas a nivel nacional.
Hasta este momento este es el panorama de la Alianza Verde de cara a las elecciones del próximo año. Se busca una unidad con otros movimientos pero también corregir los errores del pasado y por qué no, permitir que quienes se han ido vuelvan como el ex concejal de Neiva Mateo Trujillo. Su trabajo representó las ideas renovadoras del partido en el Huila pero al final decidió dejar la región y quienes creyeron en él, quedaron como al principio, en nada.
Acuña dice no haber entendido nunca la decisión de Trujillo, de irse, sin más, cuando lo tenía todo para ser en estos momentos una de las figuras que podría estar desempeñando un rol importante en el departamento. No obstante, renunció al Concejo, encabezando un movimiento contra la corrupción que permeó a gente de su propio partido que lo veía como su enemigo porque no los secundaba en lo que estaban haciendo, y lo hicieron a un lado.
Trujillo lanzó su candidatura a la Cámara de Representantes, pero no le alcanzó. “Él tuvo varios errores y luego tomó la decisión de apartarse y abandonó su gente. Varios de sus amigos cercanos se sintieron abandonados y eso en política es un error grave, no se perdonan. Pero nosotros no lo rechazamos porque queremos gente que encarne el cambio y nos ayude a construir partido”, concluye Acuña.
